viernes, 20 de abril de 2007

Notas de la Didáctica Crítica.

No entendemos que una Didáctica sea crítica si no parte y se enmarca dentro de una Pedagogía crítica y ésta tampoco será crítica si no se ubica dentro de una teoría o filosofía crítica. Es la misma, digo, aunque pueda recibir distintos nombres; por ejemplo: didáctica transformadora, didáctica liberadora, didáctica popular, didáctica emancipadora, didáctica crítico-dialógica, didáctica ecocrítica, didáctica contextual…

La didáctica crítica parte de un disgusto y de un deseo. DC no es la Didáctica tradicional, transmisiva, autoritaria, objetiva y vertical; bancaria, conservadora, descomprometida, evasiva, descontextualizada, desvitalizada, aburrida, escolástica. Hablamos de un conocimiento construido, mediado, social, investigador, conectado con la vida y generado en la acción comunicativa, argumentada y consensuada. Ejemplos de esos movimientos sociales pueden ser el Movimiento de los sin Tierra (MST), de Brasil, movimientos alterglobalistas, movimientos cívicos de liberación integral, movimientos ecológicos liberadores de los empobrecidos, ciertas ONGDs que luchan por la liberación de los explotados. Así, el materialismo mecanicista considera al sujeto como receptivo. Su esquema podría ser el siguiente: Objeto… Sujeto… Captación y adecuación del objeto. Es el sujeto quien produce al objeto que sin aquel no tiene existencia real. La capacidad pensante y abstracta del ser humano da vida al objeto. El sujeto y el objeto viven en simbiosis. Son simultáneamente acción-recepción. Activos-pasivos. Son una realidad viva. Razón espiritual y vida material. Sujeto y objeto dialécticamente relacionados, interdependientes, mutuamente influenciados. No teoría antes y práctica después; sino teoría-práctica-teoría… en infinitas vueltas de confrontación entre reflexión y acción. Son interrogante y respuesta. El resultado, fruto de la praxis o acción-reflexión-acción, es una transformación del sujeto y del objeto. Éste pasa de ser un ente físico, externo a la persona, a ser una realidad social. Este modo social de construir conocimientos científicos está alimentado de luchas y de uniones, de zozobras y aseveraciones, de aciertos y de errores. Investigación que, como el sujeto y el objeto del conocimiento, debe de hacer referencia a su opuesto u objeto investigado, por entenderse desde la perspectiva dialéctica e interactiva. Se trata de una investigación interdependiente, donde no se da diferenciación entre investigador e investigado o, dicho de otra manera, donde el investigador es investigado y el investigado es otro investigador.

viernes, 6 de abril de 2007

LA DIDÁCTICA CRÍTICA.

La Didáctica Crítica frente a la Didáctica de la escuela capitalista.

Puesto que la didáctica es sociocrítica, debe de analizar la sociedad u orden social en el que vivimos. En efecto, la Didáctica crítica enfoca la disciplina de la acción didáctica desde los planteamientos de la teoría crítica y por tanto interpreta al orden social neoliberal como la última fase del capitalismo. Concretamente, se opone a la globalización neoliberal a la que denomina globalización parcializada, a la escuela capitalista y, por tanto, a la escuela como empresa.

La escuela crítica es una institución no una organización. Christian Laval (2004) dice que la escuela neoliberal niega profundamente la función cultural de la escuela.

A esta escuela capitalista corresponde una Didáctica con las siguientes características:

- Una Didáctica cuya fundamentación epistemológica se apoya en el conocimiento técnico. - La Didáctica neoliberal no contextualiza la enseñanza.

- La Didáctica capitalista reproduce los valores imperantes en la sociedad, una sociedad que está controlada por una capa económicamente poderosa. Suelen ser valores que contribuyen al sostenimiento de la riqueza.

- La Didáctica de la escuela capitalista desea preparar al capital humano en una escuela única, accesible a todos y cualificada. Christian Laval (2004) y Nico Hirtt (2001) adelantan, apoyados en argumentos serios, la tesis del repliegue educativo y de una política de austeridad para el gasto público en educación y para la formación del “capital humano”, término muy acorde con los planteamientos reduccionistas de la filosofía neoliberal y menos apto bajo el punto de vista de la antropología humanista. - Consecuentemente, la Didáctica neoliberal de la escuela capitalista, sigue arropándose con otros atributos, tales como el del simplismo en la búsqueda de las causas, el de afirmar que la práctica docente debe ajustarse a los principios de la teoría acogida en las ciencias experimentales, sin contar con la imprevisión de los acontecimientos del aula ni con la autonomía de los profesores, dueños y exclusivos conocedores de la práctica ubicada. Se trata de una Didáctica domesticadora, inculcadora de supuestos, controladora de las conciencias subjetivas, a las que ordinariamente no consideran los modos autoritarios de operar; utilitarista, profesionalista, mercantilizadora, homogeneizadora por no contar con las aportaciones de la diferencias y de los sujetos diversos, ya que la ciencia de la Didáctica neoliberal no suele ir acompañada de la con-ciencia subjetiva de los aprendices y docentes. El estilo organizativo resultante se llama gestión empresarial de la escuela y de la enseñanza, alimentado de recetas fragmentadas y de retazos innovadores que no logran presentar un cuerpo compacto de escuela humanista y crítica, así como tampoco una Didáctica personal, autónoma y coherentemente transformadora.

Ante tal desbarajuste pedagógico, la Didáctica Crítica no se conforma con oponerse o enfrentarse activamente a la escuela y a la Didáctica capitalistas, propias del desorden neoliberal parcialmente globalizado; sino que debe de presentarse y actuar positivamente como un ariete educativo que ofrece dimensiones propias, métodos específicos y naturaleza de auténtico planteamiento didáctico. Tratemos, pues a continuación, de la DC en sí misma, resaltando sus aspectos positivos.